Un caso de enorme relevancia respecto de la dignidad de los niños que están por nacer y de los derechos de la familia es el de Jacqueline Grosso, ciudadana uruguaya de escasos recursos a la que se le provocó violentamente un aborto contra su voluntad y que sufrió un drama tremendo que sólo empeoró con el tiempo. Perdió a su hija, Victoria Jazmín, que fue considerada un desecho biológico que no pudo ni siquiera ver, por la excusa de que la ley uruguaya no considera persona a los fetos que pesan menos de 500 gramos.El caso hoy se encuentra en un proceso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la cual el mes pasado declaró parcialmente admisible la denuncia contra el Estado de Uruguay.
El caso hoy se encuentra en un proceso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, la cual el mes pasado declaró parcialmente admisible la denuncia contra el Estado de Uruguay. Si te interesa saber más sobre este caso, te invitamos a revisar una breve clase preparada por nuestro equipo judicial.