Author : Comunidad y Justicia

Cámara de Diputados votará en marzo informe sobre “tratamientos transafirmativos” en niños

En marzo, la Cámara de Diputados decidirá el futuro del Informe Final de la Comisión Especial Investigadora Nº57 (CEI), que examinó los programas estatales de acompañamiento para menores cuya identidad de género no coincide con su sexo registral. El informe denuncia graves irregularidades, como la realización de tratamientos hormonales en la red pública de salud sin autorización parental ni respaldo científico, y revela que más de 600 menores han sido sometidos a estas terapias en el sistema público.

Presidida por la diputada Francesca Muñoz, la Comisión Nº 57 sesionó en 11 ocasiones, y recibió distintos testimonios de autoridades, médicos, psicólogos, padres, detransicionadores y personas trans. Entre sus principales hallazgos se encuentra que los tratamientos hormonales, como bloqueos puberales y hormonación cruzada, se aplican a menores desde los 10 años, a menudo sin el consentimiento expreso de los padres, y que podrían causar daños irreversibles, como infertilidad y problemas óseos.

El Programa de Acompañamiento a la Identidad de Género (PAIG), implementado en 37 hospitales, también fue cuestionado por facilitar la derivación de menores a terapias hormonales. Según el informe, más de 2.500 menores han ingresado al PAIG desde marzo de 2023, incluyendo 50 niños menores de 10 años. El informe advierte que estas prácticas están siendo abandonadas en países como Suecia, Finlandia y Reino Unido, que han restringido drásticamente los tratamientos hormonales en menores debido a los riesgos asociados.

Entre las recomendaciones principales, el informe sugiere suspender los tratamientos hormonales transafirmativos en menores, auditar los casos ingresados al PAIG y reformar la Ley de Identidad de Género para reforzar el derecho preferente de los padres en decisiones sobre sus hijos.

La votación será clave para definir el camino que tomará Chile en relación con las políticas de identidad de género en menores de edad.

Un padre, Orlando, entregó su testimonio sobre cómo pidió más prudencia y se opuso a que su hija de 15 años fuese tratada socialmente como hombre en el colegio. Por lo anterior, fue denunciado y “el tribunal decide quitarme el cuidado personal de mi hija y derivarla a otra familia. Finalmente, en febrero, llegan a mi casa y retiran a mi hija de mi lado. (…) ahora estoy sin ella. Han pasado ocho meses y no ha cambiado en nada su condición. (…) A todo esto, tuve una medida cautelar con Carabineros fuera de mi casa; o sea, como si el no reconocer a mi hija fuese una situación más allá de lo grave. Durante dos meses tuve a Carabineros yendo a mi casa todas las semanas. Incluso, en febrero, cuando tuve la última audiencia en tribunales, a la mitad de esta, tenía a un carabinero en mi casa para llevarse a mi hija”. 

Se desconoce cuántos padres más se encuentran en la misma situación, pero los casos similares (reportaje en radio Bío Bío y el Informe Especial de TVN) indican que podrían ser muchísimos más. 

>> Lee la minuta de nuestro equipo Legislativo aquí.

Nuevos pasantes se sumaron a nuestro equipo este verano

Con gran entusiasmo y compromiso, el pasado lunes 06 de enero comenzó nuestro Programa de Pasantías de Verano 2025, una instancia en la que cuatro estudiantes de Derecho trabajaron con nuestro equipo. 

Durante tres semanas, los pasantes asumieron tareas específicas y recibieron formación en áreas fundamentales para su desarrollo profesional.

Los participantes de este ciclo fueron:

  • Sofía Montenegro, área de investigación, estudiante de la Pontificia Universidad Católica de Chile.
  • Álvaro Ferrer, área judicial, estudiante de la Universidad de los Andes.
  • Alberto Vargas, área judicial, estudiante de la Universidad Adolfo Ibáñez.
  • Luke Schafer, área legislativa, estudiante de la Universidad de Harvard.

Esperamos que esta experiencia les haya permitido fortalecer su formación personal y profesional.

Agenda legislativa: 13 al 17 de enero

CÁMARA DE DIPUTADOS

15 de enero
De 17:30 a 19:30 horas.

Proyecto de ley que reconoce el derecho al cuidado y crea el sistema nacional de apoyos y cuidados.

La Comisión de Desarrollo Social continuará la discusión y votación en particular del proyecto de ley, de origen en mensaje, con urgencia calificada de “suma”. Para este propósito se ha invitado a la Subsecretaria de Salud Pública, señora Andrea Albagli Iruretagoyena y a la presidenta de la Fundación José Galasso, señora Odette Hofer.

Boletín N°16.905-31. 

El área legislativa se encuentra colaborando con los diputados a través del envío de minutas con sugerencias de votación y su respectiva fundamentación. El proyecto de ley profundiza en la autonomía progresiva de los menores de edad y establece una intervención estatal muy extensa en las decisiones al interior de la familia.

SENADO

15 de enero
De 10:30 a 12:00 horas.

Proyecto de ley sobre reforma integral al sistema de adopción en Chile.

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento continuará con la discusión de este proyecto de ley. Para lo anterior, recibirá en audiencia a la Ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro.

Boletín 9.119-18. 

El proyecto permite el avance de la denominada “adopción homoparental”. Asimismo, debilita el principio de subsidiariedad en materia de adopción.

14 de enero
De 09:30 a 11:00 horas.

Proyecto de ley que establece la ley integral de salud mental y modifica los cuerpos legales que indica.

La Comisión de Salud continuará con la discusión en general de este proyecto de ley, recibiendo en audiencia a la Ministra de Salud, Dra. Ximena Aguilera.

Boletín 17.003-11.

El proyecto de ley incluye referencias a la prohibición de las “terapias de conversión”, y que en el caso de las personas con disforia de género implicaría solo aceptar el modelo transafirmativo

Roberto Astaburuaga: “La cultura chilena es antinatalista”

Semana a semana, nuevos estudios y voces alertan sobre la crisis demográfica chilena. El rápido descenso en el número de nacimientos es una tendencia imparable desde el 2014. Este problema no se soluciona con el aumento de nacimientos de madres extranjeras y no revierte la tendencia de baja natalidad, porque, como se explicó la semana pasada en El Mercurio, “en el mediano y largo plazo irá disminuyendo porque los migrantes se van adaptando a la cultura del país de llegada”. Esto último es importante: ¿la cultura chilena es antinatalista? Porque, pareciera, que la cultura chilena desincentiva, a chilenos y extranjeros, tener más hijos.

Algunos han analizado esta crisis mirando hacia adelante y los efectos que se producirían en los sistemas de salud y de pensiones, la economía y la fuerza laboral, etc.; como si fuera sólo un problema de números. Otros lo han abordado desde una perspectiva feminista, enfocándose en la decisión y motivos de la mujer para el “cuándo” de la maternidad, como si la decisión fuese individual. La Encuesta Bicentenario 2024 intenta revisar las causas que originan esta caída y también datos del INE dan luces al respecto, y abundan en razones del tipo priorizar la estabilidad económica y laboral, el miedo al fracaso, la falta de “preparación”, la excusa ambientalista, el sacrificio y costos que implica, etc.

Estas razones son las que han configurado, lentamente, una cultura que ha preferido que la mujer se incorpore al mundo laboral y trabaje de la forma en que los hombres trabajan y no considerando las particularidades propias y esenciales de la mujer. Una cultura que ha potenciado la estabilidad en todo orden de cosas (económico, académico, personal) antes de tomar el riesgo de tener uno o dos hijos, porque no estamos hablando de familias numerosas. Una cultura que ha demonizado al hombre como un opresor y violador por naturaleza. Una cultura que tiene al Estado atornillado dentro del hogar con voz y voto en cada decisión que se toma. Una cultura que ha privilegiado los derechos sobre los deberes, y el egoísmo sobre el sacrificio y el compromiso, que ha debilitado el matrimonio y las uniones sólidas entre padres e hijos en lugar de ofrecer ayuda para que sean duraderas. Una cultura que desgarra vestiduras por animalitos y plantitas, cuando hay familias, personas de carne y hueso, que sufren hambre. Una cultura en la que las autoridades no se atreven a decir verdades incómodas y establecer prioridades reales y prefiere bailar al ritmo del tweet, la funa y la encuesta. Una cultura que ha combinado exitosamente lo peor del liberalismo individualista, el socialismo estatista y el progresismo hedonista. Esa es la cultura chilena. Esa que se pasea, sin pudor, en los reality shows y se escribe, también sin pudor, en las leyes. Esa cultura es la que mueve la publicidad de las empresas y que apela a la pasión y no a la razón para, insaciablemente, comprar y consumir.

La crisis demográfica no se arreglará con políticas públicas que mejoren los números para tener sistemas de pensiones sostenibles en el tiempo. Se necesita algo mucho más permanente, inmutable. La cultura que garantizaba la existencia y desarrollo de las instituciones y comunidades que dan larga vida a los países, ya no existe. El cambio de switch debe alcanzar a las siguientes generaciones, y eso es un tema de educación. No basta con que nazcan más, si ellos no son (bien) educados. Porque los hijos no son números en un Excel sobre estadísticas de natalidad, sino personas que requieren de educación, autoridad, corrección y crianza, por padres que cuenten con apoyo para sortear las dificultades inevitables de vivir juntos y ayudarse mutuamente. Guste o no, mientras más tiempo estén juntos, mejor para sus hijos, y por eso el matrimonio es mejor que cualquier otra unión. No ver el problema en su totalidad es retrasar la catástrofe demográfica.

Chile abandonará su crisis antinatalista cuando apueste por una cultura natalista.

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Agenda legislativa: 6 al 10 de enero

CÁMARA DE DIPUTADOS

7 de enero
De 19:30 a 21:00 horas.

Sesión especial de la Sala, para la discusión y votación de cuatro Informes Finales de Comisiones Investigadoras, entre ellos, el de la Comisión Nº57, sobre tratamientos transafirmativos a menores de edad.

8 de enero
De 17:30 a 19:30 horas.

Proyecto de ley que reconoce el derecho al cuidado y crea el sistema nacional de apoyos y cuidados.

La Comisión de Desarrollo Social continuará la discusión y votación en particular del proyecto de ley, de origen en mensaje, con urgencia calificada de “suma”. Para este propósito se ha invitado a la diputada Emilia Schneider Videla, como autora del proyecto.

Boletín N°16.905-31. 

El área legislativa se encuentra colaborando con los diputados a través del envío de minutas con sugerencias de votación y su respectiva fundamentación.

SENADO

6 de enero
De 10:30 a 12:00 horas.

Proyecto de ley sobre reforma integral al sistema de adopción en Chile.

La Comisión de Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento continuará con la discusión de este proyecto de ley. Para lo anterior, recibirá en audiencia a la Ministra de Desarrollo Social y Familia, Javiera Toro.

Boletín 9.119-18. 

El proyecto permite el avance de la denominada “adopción homoparental”. Asimismo, debilita el principio de subsidiariedad en materia de adopción.

Roberto Astaburuaga: “El “récord” de Lily Phillips”

Phillips, “modelo” inglesa de OnlyFans, “logró” la “hazaña”, en octubre de este año, de tener relaciones sexuales con 101 hombres en 24 horas, cuya experiencia relató en un documental titulado “Me acosté con 100 hombres en un día”.

El documental es la evidencia del punto al que ha llegado la degradación de la sexualidad; de la sociedad hipersexualizada; del enfermizo consumo de pornografía; de la cosificación de la mujer; del absurdo lema individualista, feminista, liberal y progresista de “hago lo que quiero con mi cuerpo”.

Basta escuchar las declaraciones de Phillips luego de su “maratón sexual de 24 horas” y ver su mirada perdida, los ojos llenos de lágrimas y las palabras balbuceantes para entender que hay algo que no está bien y que ella misma intuye: “no es para chicas débiles. Fue difícil. No sé si lo recomendaría. Es una sensación diferente. (…) era un desastre emocional detrás de escena”. La despersonalización de lo que hizo/le hicieron llega al punto en que reconoce que no recuerda caras ni nombres: “En mi cabeza puedo pensar en cinco, seis, diez chicos que recuerdo. Y eso es todo. Es extraño, ¿no? Si no tuviera los videos, no me habría dado cuenta de que había hecho cien“, y que, por lo mismo, actuó de una forma automática, al punto de sentirse “robótica” como si ya se tratase de una “rutina”.

Cualquier padre o madre que lea estas líneas, y tenga una hija de 23 años -la edad de Lily- ¿qué pensaría de saber que su hija haría algo así? ¿O que fuese la hija de un amigo? ¿O que su hijo sería uno de los 100 “participantes”?

Si la sensación que transmitía Lilly antes del día en cuestión era de un cierto nerviosismo y emoción, la reacción posterior sólo refleja tristeza. Pero hay dos tipos de tristeza: una, que genera el impulso de recapacitar una vez que se ha tocado el fondo de la degeneración, y otra, que es la pérdida de toda esperanza, la defraudación de toda expectativa, y que acarrea a sentimientos de angustia y desánimo. Esta segunda tristeza no busca salir del abismo en el que ha caído, sino que permanece en él. Pareciera que Lilly se encuentra en este segundo tipo de tristeza: días después del “logro” anunció que buscaría “superar la marca” y que ahora fuesen 1.000 hombres en 24 horas.

En Chile, este fenómeno -OnlyFans, Arsmate y similares- no es extraño, y del mundo de la política, de la farándula, del deporte y del periodismo cada vez se suman más a la venta de “contenido para adultos”. No pasa ni una semana sin que algún medio anuncie que tal o cual persona abrió cuenta en la impúdica plataforma. Distintas razones se arrojan, como justificando la necesidad de entrar a una realidad virtual falsa, impúdica e indigna tanto del que se expone como del que busca y mira.

La normalización de esta nueva forma de prostitución es bastante clara respecto a la señal que se envía a la sociedad y a los menores de edad.

Y es que sí es un tema al que los adolescentes tienen acceso inmediato: saben cuando alguien famoso ingresa, cuánto gana en sus primeras semanas, etc. La celebración de esta triste realidad genera un impacto en el que tomar ese “camino” se plantea como una posibilidad real, frente a la decisión de estudiar y trabajar. Pero todo tiene un costo, que no se reduce simplemente al monto por el que se vende y compra de contenido sexualmente explícito. La autodegradación que genera la banalización de la sexualidad genera un vacío y una destrucción interna tanto para quien crea el contenido como para quien lo consume, pues ambos simplemente usan al otro. Y no hay duda de que la dignidad humana exige que cada uno sea tratado como un fin y no como un medio, como una persona y no como una cosa.

Ojalá que Lilly Phillips no rompa su propio récord.

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Primer curso de verano para universitarios

Durante la semana del 16 al 20 de diciembre se llevó a cabo un curso intensivo sobre los fundamentos cristianos de la política, en el que se exploraron las bases teológicas y filosóficas de la visión católica de la política y de la Doctrina Social de la Iglesia.

Esta primera edición del curso abordó temas clave relacionados con la visión clásica de la vida social, como el sentido de la autoridad y los órdenes familiar, económico y jurídico. Esta instancia contó con la participación de diez estudiantes de diversas carreras, como Derecho, Historia, Filosofía, Ingeniería y Literatura, provenientes de distintas universidades.

Roberto Astaburuaga: “El año negro del lobby trans que experimenta con niños”

El 2024 no será recordado con alegría por el lobby trans, tanto en Chile como en otros países. Por supuesto que la victimización, la negación y la mentira han sido su principal respuesta, pero es imposible que sigan ocultando un escándalo médico sin precedentes en la historia y una violación sistemática de los derechos de los niños al someterlos a tratamientos experimentales y sin evidencia científica que provocan daños irreversibles. La verdad ha comenzado a salir a la luz.

La publicación del Informe Cass, por su irrefutable contundencia y seriedad, sólo aceleró un efecto dominó que comenzó en Europa a mediados de 2019. Pronto, los Estados europeos comenzaron a restringir o eliminar la posibilidad de que los niños autopercibidos trans puedan acceder a tratamientos hormonales. En esta línea se encuentran Finlandia, Dinamarca, Reino Unido, Italia, Francia, Suecia y Noruega. En otros países, el tema está siendo fuertemente discutido y puede ser que en 2025 existan avances, como en Alemania y Bélgica. Lo mismo ocurre en varios lugares de Estados Unidos, donde además hay casos de demandas que están siendo conocidas por la Corte Suprema. Sin embargo, Canadá, España, Australia y Nueva Zelandia insisten en mantener un enfoque afirmativo que es sólo ideología. A nivel latinoamericano, Chile destaca por liderar la ofensiva para salvar a los niños.

El caso chileno es similar al de David contra Goliat. Quienes defienden el enfoque afirmativo -comenzar a hormonizar y mutilar por la sola autopercepción del niño- encuentran apoyo en las universidades, asociaciones gremiales, clínicas, jueces, políticos, empresas farmacéuticas, medios de comunicación, municipalidades, instituciones estatales, redes de poderosos activistas y lobistas, etc. Contra ellos se enfrentan padres que han sido amedrentados por el chantaje emocional “hijo trans o hijo muerto”, e incluso a algunos les han quitado, por orden judicial, a sus hijos al oponerse a que ingresen a programas como el PAIG, como consta en un testimonio; doctores que han sido amedrentados; testimonios de detransicionadores que han sido perseguidos y acosados; etc.

Pero el mayor enemigo es el silencio cómplice: aquellos que teniendo el deber y la posibilidad de denunciar esta macabra situación se quedan callados, por temor a la funa de soltarse del yugo identitario, o a los doctores y funcionarios de salud que saben lo que está ocurriendo. Ellos, que saben lo que le está pasando a miles de niños confundidos y a padres angustiados, y que no están de acuerdo, prefieren mirar para otro lado. A la izquierda y a la derecha progresista les corresponde, como primera medida para comenzar a reparar el mal causado, alzar la voz y denunciar las barbaridades que ocurren en el sistema de salud, público y privado.

A pesar de lo anterior, ¿por qué, entonces, ha sido un año negro para el lobby trans?

Porque gracias a Sabine Drysdale, a Santiago Pavlovic y a la Agrupación Kairos conocimos la existencia de casos reales de padres a los que les han quitado a sus hijos y de las presiones a las que se ven sometidos para iniciar tratamientos hormonales en la primera consulta.

Porque gracias a testimonios como el de Santiago HormazabalNicolás Raveau y Nael Condell se supo, de primera fuente, cuáles son los efectos de las hormonas y los daños y peligros del enfoque afirmativo.

Porque diputados y senadores, de distintos colores políticos, comprometidos con buscar el mayor bien de los niños, crearon una Comisión Investigadora en la que se supo cómo el PAIG, ese programa para niños entre 3 a 17 años, cual parásito, esta enquistado en el Estado y absorbe casos de menores que supuestamente son trans; que hay al menos 600 niños recibiendo hormonas; que existe, al menos, una derivación al PAIG de un niño desde un jardín infantil; que hay un número desconocido de municipalidades que entregan este tipo de “atención”, incluso medicamentos a través de las Farmacias Populares. Porque esos parlamentarios también recibieron, en la Comisión de Familia del Senado, a expertos que alertaron sobre el bajísimo y paupérrimo nivel de evidencia científica que respalda estos programas; y denunciaron ante la Fiscalía las decenas de operaciones de reasignación de sexo a menores de edad;  impulsaron normas en la Ley de Presupuestos para disminuir el gasto público mediante la prohibición de las terapias  hormonales y cirugías transafirmativas a menores de edad; y recurrieron ante el Tribunal Constitucional para defender dichas normas cuando el Gobierno solicitó que fuesen declaradas inconstitucionales.

Porque distintas organizaciones socialescentros de estudios y fundaciones alertaron y denunciaron lo que ocurría en Chile, informaron y pusieron el tema en la opinión pública.

Porque personas e instituciones, desinteresadamente y según sus especialidades y conocimientos, defendieron la idea de que la medicina está al servicio de la razón, no de la ideología, y debe curar, no dañar; que los niños son sagrados y no están para ponerlos primeros en la fila de la hormonación.

Falta mucho por conocer y responsabilizar. Ante el desorden provocado, la restauración se vuelve inevitable, y así ocurre en los países pioneros en estos “tratamientos”. Pero se requiere perseverar para que nunca más se experimente con niños, ni se chantajee a los padres, ni que el Estado imponga su visión ideológica. Ese es el trabajo que nos espera para el 2025: que los silentes, de todo tipo, saquen la voz y los que ya han hablado no se desanimen y persistan en luchar por salvar a nuestros niños.

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Roberto Astaburuaga: “El Tribunal Constitucional que inventa excepciones”

La discusión de la Ley de Presupuestos estuvo marcada por controversias en distintos temas que se materializaron en normas, entre ellas, las referidas a la Ley Lafkenche, a Aula Segura, a las contribuciones o a la prohibición de financiamiento a tratamientos hormonales transafirmativos y cirugías de reasignación de sexo a menores de edad. Como todas fueron aprobadas, el gobierno solicitó la eliminación de 13 normas y al mismo tiempo se presentaron siete requerimientos parlamentarios que impugnaban solo algunas de ellas.

El Tribunal Constitucional resolvió el viernes pasado que conocería el fondo del requerimiento del gobierno y cinco de los siete requerimientos parlamentarios. Sin embargo, en la decisión de admitir del gobierno, el derecho fue dejado de lado.

Cuando el gobierno presentó su requerimiento, no acompañó determinados documentos y el Tribunal Constitucional le ordenó que lo hiciera en un plazo de tres días. El Ejecutivo corrigió lo hecho y envió los documentos, pero se le olvidó adjuntar un archivo y cuando lo hizo, el plazo ya había vencido.

Cualquier estudiante de Derecho sabe que si no se cumple lo ordenado por el tribunal, el requerimiento, simplemente, se tiene por no presentado. La propia ley que rige al Tribunal Constitucional (artículo 65, inciso 2º) señala expresamente: “Si así no lo hacen, el requerimiento se tendrá por no presentado para todos los efectos legales”. La norma no admite ningún tipo de excepción.

¿Cuál fue el archivo no acompañado? La Ley de Presupuestos. ¿Y que dijo el tribunal para salvar al gobierno de su propio error? Que el requisito establecido en la ley era “jurídicamente inconducente” ya que la Ley de Presupuestos se había publicado en el Diario Oficial. Es decir, el requirente no acompaña todos los documentos, el Tribunal Constitucional le indica que acompañe uno que falta, el gobierno lo hace fuera de plazo y el tribunal decide que da lo mismo porque, en verdad, no era necesario. ¡Plop!

Por otro lado, si el Tribunal Constitucional consideró que el documento no acompañado (el proyecto de Ley de Presupuestos 2025) era innecesario porque ya había sido promulgado y se presumía conocido, ¿para qué lo pidió en la resolución de no admisión a trámite, no solo respecto al requerimiento del gobierno, sino que también respectos a otros seis requerimientos parlamentarios contra distintas glosas de la mencionada Ley de Presupuestos (Roles 15.981, 15.993, 15.994, 15.995, 15.996 y 15.999)?, ¿a cuál resolución le creemos, a la que considera indispensable el documento ausente, de acuerdo a lo establecido por ley o a la que prescinde de aquel porque es la única forma de sanear de oficio el requerimiento del gobierno?

¿Qué garantía de justicia y seriedad se puede esperar de un tribunal incapaz de obedecer la ley que rige su propio funcionamiento? Si operan de esta manera en este caso, qué impide que no inventen nuevos “casos excepcionalísimos” para salvar causas afines ideológicamente a la mayoría del Tribunal Constitucional. ¿Es esto una muestra más de que el Tribunal Constitucional se ha convertido en un legislador, modificando los procedimientos a su gusto?

Así, el fundamento de los votos de los ministros ideológicamente afines al oficialismo, que estuvieron por admitir a trámite el requerimiento del gobierno, revelan su escaso apego por las normas y el Estado de Derecho, a diferencia de quienes se opusieron. Estos segundos, correctamente, señalaron que no le corresponde al Tribunal Constitucional subsidiar ni suplir los errores de los requirentes.

El precedente que se ha instalado es peligroso, porque el cambio de jurisprudencia no obedece a un control jurídico, sino a uno político. Si el Tribunal Constitucional inventó una excepción respecto al cumplimiento de los requisitos de forma, qué impide que haga algo similar respecto al fondo. Si el tribunal actuó arbitrariamente en esta causa, qué impide que lo haga en otras. La desconfianza en el Tribunal Constitucional, ya instalada, solo aumenta con este tipo de episodios.

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Roberto Astaburuaga en ConectAR: “El Minsal capacitó a 200 funcionarios para derivar menores a tratamientos hormonales”

“En enero, el Ministerio de Salud capacitó a 200 funcionarios para derivar a los niños desde el PAI hacia la hormonización”, reveló nuestro abogado Roberto Astaburuaga en el programa ConectAR, emitido el viernes 13 de diciembre. “Esto no es un proceso espontáneo, es una estructura del Estado que absorbe casos y los dirige hacia tratamientos irreversibles”, destacando cómo el programa está diseñado para conectar los casos con intervenciones médicas.

“El PAIG funciona como una esponja. Absorbe casos desde distintas instituciones y los concentra en un solo lugar, donde los derivan a la hormonización”.

Roberto Astaburuaga

En conversación con José Ignacio Palma, conductor de ConectAR, nuestro asesor legislativo Roberto Astaburuaga, criticó duramente el Programa de Acompañamiento a la Identidad de Género (PAIG), afirmando que no es un acompañamiento neutral, sino un paso previo hacia tratamientos hormonales irreversibles en menores de edad. 

El Ministerio de Salud sabe que la evidencia científica para el bloqueo puberal es extremadamente baja, mala y sesgada. Lo saben desde marzo del año pasado y lo actualizaron en mayo de este año, pero aún así no lo detienen”, afirmó.

Respecto a las cifras oficiales del PAIG, nuestro asesor denunció que están infladas y basadas en un estudio extranjero desactualizado: “La versión del PAIG dice que hay 37.000 niños beneficiarios, pero eso viene de un estudio de Estados Unidos hecho en 2013. Si aplicáramos un porcentaje serio, como el 0,02%, la cantidad real sería entre 50 y 400 casos”.

Además, describió al PAIG como un programa estructuralmente problemático que funciona de manera expansiva en el aparato estatal: “El PAIG funciona como una esponja. Absorbe casos desde distintas instituciones del Estado –salud, colegios, tribunales de familia– y los concentra en un solo lugar, donde los derivan a la hormonización”.

También, compartió el testimonio de un padre afectado, expuesto en la comisión investigadora: “En mayo del colegio, lo derivaron a la Oficina de Protección de Derechos y desde ahí fui llevado a tribunales, donde emitieron un informe que decía que yo había hecho una grave vulneración de derechos por no haber tratado a mi hija en su nueva condición”.
Para finalizar, nuestro abogado hizo un llamado a los padres afectados a romper el silencio: “Yo lo que le diría a los padres es que cuenten su caso con nombre y apellido, y que se haga público lo que le están haciendo a los niños en Chile. Ellos van a obtener mucho apoyo en distintos ámbitos”.

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